Este fin de semana, en el marco del V Torneo Monarca, se llevó a cabo en Mérida, Yucatán, el proceso de capacitación dirigido a aspirantes a jueces femeniles de Charrería.
Durante las jornadas, las participantes recibieron formación especializada sobre el reglamento, criterios de evaluación y normativas vigentes en las competencias de escaramuzas, reafirmando el compromiso con la equidad y profesionalización en el juzgamiento de esta disciplina, y con la finalidad de poder contar con más jueces activas de forma oficial.
La capacitación incluyó sesiones teóricas y prácticas, en las que se abordaron aspectos técnicos fundamentales para la correcta evaluación de las rutinas ejecutadas por las escaramuzas.
Además, las aspirantes fueron sometidas a evaluaciones diagnósticas con el objetivo de medir su nivel de conocimientos y habilidades en la interpretación y aplicación del Reglamento Oficial del sector Femenil.
Todo el proceso fue supervisado por la Coordinadora Nacional de Escaramuzas de la Federación Mexicana de Charrería, Silvia Rodríguez Rodríguez, quien contó con el respaldo de un grupo de damas jueces, conformado por Rocío Velázquez, Gisela Osornio y Roxana Maldonado quienes, además de desempeñar su labor calificando el torneo, participaron activamente en la capacitación, compartiendo su experiencia y conocimientos con las aspirantes.
Este proceso forma parte de una estrategia nacional para fortalecer la participación de los nuevos valores de las damas jueces de la Charrería, promoviendo su preparación y certificación conforme a los estándares establecidos por la Federación Mexicana de Charrería.
La evaluación diagnóstica permitirá identificar áreas de oportunidad y diseñar planes de capacitación específicos para cada aspirante, con el fin de garantizar un cuerpo arbitral mejor preparado y en constante actualización.
Las participantes destacaron la importancia de este tipo de capacitaciones, ya que les brindan herramientas clave para desempeñar su labor con mayor precisión y profesionalismo.
Asimismo, expresaron su entusiasmo por formar parte de un esfuerzo que busca garantizar la transparencia y justicia en la calificación de las competencias de escaramuzas, una de las disciplinas más emblemáticas de la Charrería.