La charrería tiene encantos, muchos encantos ocultos. Uno de esos, es el enorme apoyo que brindó el presidente José López Portillo en el sexenio 1976-1982, donde destaca nuevamente la relación México-España.

La Cultura Charra es Importante y tiene su historia, como cuando el 25 de octubre de 1973 se Reconstruyó el Museo en la Ciudad de México. Por eso lo plausible que, en la gestión del ingeniero José Antonio Salcedo López, todo siga viento en popa.

Entre el mar de recuerdos que están a la vista en el Museo de la Charrería, en Isabel La Católica y José María Izazaga de la capital del país y con entrada gratuita, hay dos fotos de López Portillo, orgulloso portando el atuendo charro.

Siendo presidente de la Federación Nacional de Charros, don Jorge Delgadillo Guerrero (1974-1978), le hacen una competencia de exhibición en honor del Lic. López Portillo en Tijuana y hacen tan buena amistad, que el mandatario le dijo que quería apoyar a los charros.

Tan fue así, que después se volvieron a reunir y comenzó ese acercamiento con el Más Mexicano de los Deportes.

En el Museo Charro existen dos fotos, donde ataviado a la usanza charra en el Estado Mayor Presidencial, José López Portillo. En una está sólo, monta un caballo tordillo y trae una bonita montura piteada y en otra lo acompaña Jorge Delgadillo Guerrero.

Son dos fotos diferentes, desde montura y atuendo. Incluso, recordó don “Beto” Carmona haber visto tirar manganas a caballo al presidente de México. La estatua en honor al Charro que está en el Antiguo Convento de Monserrat, la develó precisamente López Portillo.

A mediados de la década de 1970, Jorge Delgadillo organizó una Gira Charra a Europa e invitaron al mandatario y debido a situaciones de agenda, no los puede acompañar, pero le da la encomienda al dirigente charro y le llevan un regalo al Rey de España (Quetzalcóatl de Plata).

López Portillo le pidió a Delgadillo tratar el tema de retomar la Relación Diplomática México-España –rota desde La Guerra Civil Española- y además llevaron un mariachi, acompañados de Humberto Cravioto.

El Rey de España, Juan Carlos I, se sabía las canciones mexicanas y hasta las estaba cantando, uniéndose después al grupo Lola Beltrán y Pedro Vargas.

En el momento oportuno de aquella reunión, Delgadillo trató el tema con el Rey de España y le comentó que traía una misiva muy importante del mandatario mexicano, de renovar la Relación Diplomática.

Gracias a la Charrería, se retomó la relación y con ello queda de manifiesto algunas cosas importantes e históricas, de la grandeza de la charrería.

Finalmente, se puede realizar una visita virtual en la página web oficial del Museo de la Charrería con la explicación atinada de don Humberto Carmona Cobo: https://museodelacharreria.org.mx