La Unión de Asociaciones de Charros de Guanajuato, encabezada por el ingeniero Gerardo Rico Cázares, y los Charros de Irapuato engalanaron el homenaje a una de las grandes personalidades de la charrería en El Bajío, José Luis Rodríguez Quintanilla

Por todo lo alto dio inicio el Campeonato Estatal de Guanajuato en su LXII edición, que tiene como sede el lienzo charro “Isidro Rico Sabanero” de Irapuato, la cual es un homenaje a José Luis Rodríguez Quintanilla, charro de abolengo y de gran fama en la entidad.

Por sus aportes a su disciplina, primero como competidor, luego dirigente y promotor del deporte de sus amores, recibió la presea Herradura de Oro, máxima condecoración de parte de la Federación Mexicana de Charrería, que preside el ingeniero José Antonio Salcedo López.

Fue el exmandatario de Guanajuato, Miguel Márquez Márquez, quien le colocó en la solapa la distinción de la que fue objeto José Luis Rodríguez Quintanilla a quien de cariño se le conoce como “Pepino” Rodríguez.

También le fue reconocida su labor charra en el estado de Guanajuato y recibió el pergamino de Su Graciosa Majestad, Sofía I, Reina de la Unión Charra en la entidad del Bajío.

Rodríguez Quintanilla fue publirrelacionista del máximo organismo charro de 1988 al 92; del 92 al 96 fue vicepresidente durante la gestión de Álvaro Vergara y del 2012 al 2016 fue miembro de la Comisión Revisora de Sedes.

El homenajeado estuvo acompañado de su distinguida esposa Alejandra y sus hijos José Luis, Jesús Roberto y Juan Pablo, así como Lidia Denis Muñoz de la Secretaría de Gobierno de Guanajuato; SGM María I, Soberana de los Charros de Irapuato; Alfredo Torres, en representación la alcaldesa de Irapuato, Lorena Alfaro, además del PUA Gerardo Rico Cázares y los exdirigentes estatales Ricardo Flores y Jesús Salvador López, entre muchos invitados más.

“Este reconocimiento es bien ganado, por ser un gran charro y gran ser humano. Dios te Bendiga”, destacó Miguel Márquez.

Don José Luis Rodríguez Quintanilla nació en 1953 en Tampico, Tamaulipas. Fue un baluarte de la charrería guanajuatense, en colas, jinete de yegua y pasador de la muerte, habiendo sido varias veces mandamás de su querida Asociación “Ignacio León Ornelas” de Irapuato.

De sus logros individuales, destaca que fue campeón nacional de paso de la muerte en Chihuahua 1971 con los Regionales de Querétaro, luego subcampeón nacional por equipos con Casas Blancas de Guanajuato en Tepic 1975 y campeón nacional de paso de la muerte y tercer lugar nacional de jinete de yegua en Monterrey 1977 con la agrupación Ignacio León Ornelas de Irapuato.

En la Fiesta Grande de Aguascalientes 1980 formó parte de Valle de Santiago y fue subcampeón nacional; en el 85 en el Nacional de Pachuca fue tercero en colas y en 1988, en el Nacional de Irapuato, con la agrupación Ignacio León Ornelas terminó como tercer lugar por equipos, amén de cetros en Nacionales de Charro Mayor.

Al frente Rancho La Victoria

De los doce escuadrones que actuaron este fin de semana en el lienzo de los Charros de Irapuato, cerca de la ExHacienda El Copalillo, únicamente Rancho La Victoria rebasó la línea de la excelencia al totalizar 336 unidades y mantenerse en la primera posición de la eliminatoria.

Debajo de la línea de las tres centenas de puntos, Unidos RHA son segundos con 260 buenos, por 215 de Luis Oliveros, 191 de Rincón de Tamayo y 183 de Rancho El Milagro de San Miguel de Allende, completando de esta forma las cinco primeras posiciones.